Pontevedra 08/02/2019

Río Ulla encara problemas económicos por la caída y envejecimiento de socios
La Sociedad Deportiva de Caza y Pesca Río Ulla no atraviesa su mejor momento. Atrás quedan los tiempos con más de un millar de socios en activo pagando las cuotas y con la caza y la pesca como forma de ocio con gran arrastre en el municipio. Según explica el presidente del colectivo, Miguel de la Calle, en la actualidad la sociedad agrupa a unos «450 o 500 socios».
Pero la caída de socios no es el único problema del colectivo. A mayores está el envejecimiento de la masa social, que también pasa factura a Río Ulla por el descenso progresivo de las cuotas de socio en función de la edad. La tasa general es de 120 euros. Sin embargo, los socios de 70 años en adelante pagan solo la mitad ?60 euros? y los de 80 en adelante están exentos del pago de la cuota.

El colectivo tiene previsto celebrar la próxima semana una doble asamblea en la que se abordará la situación. Según avanza el presidente, será el lunes 18 de febrero a las 20.00 horas en la sala de exposiciones de Abanca.

En primer lugar se celebrará una asamblea extraordinaria para abrir el proceso electoral de cara a la celebración de comicios a finales del mes de mayo.

A continuación tendrá lugar otra asamblea ordinaria en la que se presentarán las cuentas del colectivo y se sortearán los cotos para la pesca de la trucha, ante el inminente inicio de la temporada. De momento, De la Calle solo avanza que las cuentas «no van muy bien» por la caída de los socios y el envejecimiento de la masa social. No obstante, prefiere no cuantificar el déficit, reservando todas las explicaciones sobre la delicada situación para la asamblea.

El presidente se limita a indicar que todo lo que se recauda a través de las cuotas se destina al pago de los salarios del personal contratado por la sociedad: dos guardias a jornada completa, una oficinista a media jornada y un socorrista durante el verano. Aunque este último contrato temporal no siempre llega a firmarse. La pasada temporada de baño, por ejemplo, no hubo ningún candidato dispuesto a cubrir la plaza.

En la asamblea se expondrá la situación con el objetivo de buscar alternativas que permitan reflotar la sociedad.

En cuanto a las elecciones, Miguel de la Calle avanza que no se presentará a la reelección. «Estoy cansado», afirma convencido de la necesidad de dar el relevo al frente del colectivo. Miguel de la Calle accedió a la presidencia de Río Ulla en el 2011, en una elecciones animadas en la que también se presentaba como candidato Lino Rivadulla Carollo. De su equipo directivo forman parte también Miguel Sande ?como secretario y responsable de la sección de Pesca?, José Antonio García Villar como tesorero y Buela como responsable de Caza. El quinto integrante de la directiva, Luis Souto, falleció a finales del año pasado.

Tras casi ocho años al frente de la directiva, De la Calle cree que ha llegado la hora de dar el relevo para que otros asuman con energías renovadas el mando en una sociedad que necesita un impulso para superar la delicada situación actual.