Andalucía 13/10/2018

Arranca la temporada montera en Córdoba
Como cada año, ¡y van…! iniciamos en los campos y montes cordobeses una nueva temporada de caza. La veda de la menor (cada vez más escasa), se levantó el pasado fin de semana, con dispares resultados. La mayor tomará protagonismo a partir de mañana.
La temporada no pinta mal, por lo menos desde la perspectiva de la caza mayor. Las últimas lluvias, aunque hayan sido repartidas de forma muy dispar, han permitido que la hierba esté empezando a apuntar en nuestras sierras, y que la bellota comience a verse por el suelo.

Las abundantes precipitaciones de la primavera han traído una gran abundancia de comida en nuestros campos, y las cuernas de los venados y gamos lo han agradecido. Los cochinos, por su parte, han criado extraordinariamente bien y su abundancia augura un sinfín de lances.


Ahora bien, no todo es oro lo que reluce. La PPA (Peste Porcina Africana) amenaza, esta vez, desde Centroeuropa (el último caso detectado ha sido en Bélgica). Los cazadores deberemos actuar con sumo cuidado, sobre todo en las visitas a otros países, para evitar algún brote que dé un mazazo a la economía de nuestras sierras.

Por el contrario, la caza menor no vive sus mejores momentos. El anticipo constituido por la media veda y el conejo en época estival ha tenido más oscuros que claros. La paloma y la tórtola siguen dando dispares resultados a lo largo de nuestra geografía. La entrada en vigor del vigente Reglamento de Ordenación de la Caza (lo hizo al comienzo de la pasada temporada), poco o nada ha cambiado. Los cazadores debemos tomar, de manera urgente, conciencia del respeto a los cupos de capturas.

Caza menor en declive
De la codorniz, mejor no hablar, pues se ha convertido un ave residual en la campiña cordobesa.

El conejo, tan abundante no hace mucho, lleva ya dando signos de agotamiento en numerosas comarcas antaño tan favorables a su supervivencia. Sin duda, el recrudecimiento de la neumonía hemorrágica-vírica (NHV) ha dado un nuevo golpe de gracia a esta especie. La recuperación de especies emblemáticas, como el lince y el águila imperial, dependen de su abundancia.

La perdiz merece un apartado especial. Durante la temporada pasada hacíamos referencia a la disparidad de factores que están colocando a esta especie señera de nuestra geografía al borde del colapso.

La liebre está herida de muerte por la aparición en esta especie de la mixomatosis, hecho insólito; pero que ha provocado un daño terrible. ¡Ay, nuestros galgueros, lo que les hacía falta…!

Del zorzal y paloma de invierno es pronto para opinar. Su llegada dependerá de múltiples factores.

En fin, prudencia y buena caza a todos y a todas los cazadores y cazadoras.