La consellera de infraestructuras, Territorio y Medio Ambiente, Isabel Bonig, ha visitado esta mañana, acompañada por la alcaldesa de la localidad de Benicàssim, Susana Marqués y el alcalde de Castellón, Alfonso Bataller, el Centro de Interpretación del Paraje Natural del Desert de les Palmes que durante el pasado año fue visitado por más de 14.000 personas. Bonig ha destacado la importancia del patrimonio natural de la Comunitat Valenciana y el esfuerzo realizado por la Generalitat para adaptar estos espacios protegidos a toda la sociedad y a las personas con algún tipo de discapacidad. En el caso del Desert, la consellera ha recordado que “en los últimos cinco años se ha invertido más de 4.000.000 de euros”.

En el transcurso de su visita, la consellera ha destacado la importancia de los últimos trabajos desarrollados por su departamento y que han mejorado notablemente el estado de conservación de este espacio protegido. Concretamente Isabel Bonig se ha referido al proyecto, finalizado recientemente, de restauración de áreas degradadas.

Según ha explicado la consellera “este proyecto, que ha supuesto una inversión superior a los 250.000 euros, ha permitido restaurar, mejorar y diversificar las zonas que se vieron afectadas por los últimos grandes incendios, en 1982 y 1995. En este caso, la conselleria ha actuado tal y como recomiendan los expertos, dejando pasar unos años y no inmediatamente después del incendio. “En total se ha actuado sobre cerca de un centenar de hectáreas”.

Gracias a estos trabajos se ha adecuado la estructura boscosa para mejorar la capacidad de regeneración natural y la estabilidad, se ha logrado reconducir el monte hacia un bosque maduro y se ha mejorado el estado fitosanitario, al mismo tiempo que se rompe la continuidad de las masas, lo que actúa como cortafuegos en caso de incendio.

El PATFOR estará aprobado antes de que acabe el año

En este sentido, la consellera ha recordado que “se está ultimando el documento que permitirá lograr una gestión racional del monte, dotándolo de una rentabilidad bien entendida”. Se trata del Plan de Acción Territorial Forestal de la Comunitat Valenciana (PATFOR) que el Consell aprobará antes de que acabe el año, probablemente entre octubre y noviembre.

“Más del 54% del territorio de la Comunitat es superficie forestal, pero este espacio sólo representa el 0,03% del PIB y además mucha de esta superficie es privada lo que dificulta la gestión y limpieza de los montes. De ahí que, la administración esté realizando un importante esfuerzo para arbitrar instrumentos que permitan obtener una rentabilidad económica al tiempo que se mantiene el bosque”, ha señalado Isabel Bonig.

“Esto es precisamente –ha continuado la consellera- lo que va a lograr el PATFOR cuya principal novedad es la apuesta por gestionar los residuos forestales para obtener biomasa lo que crearía puestos de trabajo y limpiaría el monte. Además a través de la biomasa se obtiene energía que se puede vender y lograr un beneficio económico”.

“Una iniciativa que comenzó hace unos meses en Enguera, a través de la subasta en montes de titularidad pública, y que esperamos que se extienda a otras zonas del interior de la Comunitat siempre bajo criterios de sostenibilidad”, ha asegurado la consellera de Infraestructuras, Territorio y Medio Ambiente.

Conservación de la biodiversidad

Asimismo la consellera ha podido comprobar los trabajos realizados por el personal del Parque para la conservación de la biodiversidad, entre los que se encuentra el proyecto de erradicación de especies exóticas.

En los alrededores del Centro de Información se sitúa una balsa de tortugas exóticas mediante la que se realizan campañas de concienciación ambiental en torno a la problemática de las especies alóctonas y que resultan muy perjudiciales para las especies propias de nuestro territorio.

Precisamente, en estas campañas de sensibilización han participado las más de 8.200 personas que han pasado por el centro desde principios de año.

Bonig ha asegurado que para el Consell los espacios naturales son una prioridad y es que se considera que “el patrimonio natural de la Comunitat Valenciana debe verse como un activo socioeconómico que permite mejorar la calidad de vida y generar oportunidades de riqueza y empleo”.

En este sentido, la consellera ha recordado que “la superficie total protegida por la legislación ambiental en nuestro territorio es de 913.823,09 hectáreas, aproximadamente el 40% de la Comunidad Valenciana. Además, hay que incluir 64.840 hectáreas de superficie marina protegida”.

Con estas cifras, la Comunitat Valenciana es la región del Arco Mediterráneo con mayor superficie protegida, a través de los lugares incluidos en la Red Natura 200, 10 puntos por encima de la media española y 20 de la europea.

Fuente: Generalitat Valenciana

 

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