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24/04/2012
Proyecto Corcino 2012 de la ACE




En estas fechas, de sur a norte de la Península, comienzan a nacer las crías de los corzos, los corcinos. Y un año más la Asociación del Corzo Español renueva el Proyecto Corcino: “NO LO RECOJAS, NO ESTÁ ABANDONADO, SU MADRE LO PROTEGE”.

Cada primavera nacen un mayor número de corcinos que, siguiendo el instinto ancestral de los cérvidos, permanezcan tumbados en la hierba para protegerse de los depredadores durante las primeras semanas de vida. Este aumento de ejemplares tiene como consecuencia que un número creciente de personas encuentren estos corcinos, con apariencia de desvalidos, aparentemente abandonados en el campo y, por ello, decidan cogerlos para cuidarlos o entregarlos a un centro de recuperación de fauna salvaje.

¿Por qué están entre la hierba?

Hay que saber que estos animales no están abandonados, ya que su madre –siempre de manera discreta- los observa constantemente. La recogida de estos ejemplares a menudo tiene consecuencias desastrosas. Estos corcinos en cautividad son muy difíciles de sacar adelante por lo que capturarles significa condenarles a una muerte probable. Los pocos que sobreviven no son aptos para ser reintroducidos en la naturaleza, ya que se han habituado a los seres humanos y han perdido su instinto de defensa y huida. Además, los machos criados en cautividad son muy peligrosos para los humanos, porque por su condición de animales agresivos y territoriales, no dudando en atacar cuando alguna persona entra en su territorio.

¿Qué hay que hacer si nos encontramos un corcino?

NO SE DEBE RECOGER: no está abandonado, su madre siempre está cerca, observándole y protegiéndole.

NO SE DEBE TOCAR: puede impregnarse de nuestro olor y su madre puede abandonarle al no reconocerle.

NO HAY QUE PERMANECER EN LA ZONA: nuestro olor en el entorno puede hacer que la madre le rechace y podrá atraer a depredadores oportunistas como el zorro.


Fuente: Asociación del Corzo Español (ACE)