APEGA defiende la perdiz roja como estandarte de nuestro patrimonio natural cinegético
El pasado dÃa 6 de septiembre tuvo lugar en la localidad de Gata de Gorgos (Alicante) la conferencia sobre la Perdiz Roja organizada por la Asociació de Perdiguers de Gata de Gorgos (APEGA), en el Centro Social de la localidad alicantina, y que fue impartida por el Doctor en BiológÃa D. Jesús Nadal y a la que asistieron un total de 150 cazadores y presidentes de cotos de caza de la Comunidad Valenciana.
Posteriormente se abrió un extenso debate con la participación del Periodista cinegético D. Alejandro Chinchilla, el ponente D. Jesús Nadal y el actual Campeón de España de Caza Menor con Perro, D. Vicente Silvestre, que expuso sus experiencias en los numerosos campeonatos en los que ha participado, y que respondió con una sinceridad encomiable a las preguntas que los asistentes le realizaron sobre la particular manera de aplicar el reglamento que se ha hecho hasta ahora, cuando existÃan sospechas de que se soltaban perdices de granja en los campos de competición.
El debate se desarrolló con la participación del público que realizó numerosas preguntas a los tres invitados, y que sirvieron para elaborar al final de la jornada las siguientes conclusiones, sobre "El conflicto entre la economÃa y la conservación en la gestión de la perdiz roja", y que fueron:
Las repoblaciones con perdices de granja suponen un incremento inmediato en el tiempo de los efectivos cinegéticos disponibles, que implican también un aumento de las jornadas disponibles de caza, lo que repercute en una mayor exposición de las perdices silvestres a la actividad cinegética, y por tanto, a la reducción de sus efectivos.
Las perdices de goma están transmitiendo una genética propia de los animales domésticos o adaptados a la cautividad, a nuestra perdiz, lo que supone que a la larga tendremos con toda probabilidad una perdiz más cercana a los "gallinos de corral" que una auténtica pura sangre en nuestros montes.
Las repoblaciones pueden suponer una puerta de entrada de nuevas enfermedades a las que nuestra perdiz no están adaptadas.
Las sueltas son más fáciles y vistosas que las mejoras de hábitat, pero tienen un coste elevado lo que influye en los presupuestos que las sociedades de cazadores dedican cada temporada a este tipo de trabajos tan necesarios, lo que repercute negativamente en nuestra perdiz salvaje.
Las perdices de goma constituyen el mejor aliciente para fomentar las poblaciones de depredadores, lo que sin duda repercutirá en agravar los problemas que ya sufren nuestras perdices.
Las perdices de granja suponen un auténtico atentado genético sobre las poblaciones de perdices rojas naturales que habitan las áreas donde se sueltan, reduciendo la riqueza de la biodiversidad de los eco tipos de perdiz que habitan en España.
El debate concluyó lanzando a los asistentes las siguientes preguntas: ¿La apuesta de los cazadores será en el futuro la conservación de nuestra perdiz salvaje o su sustitución por la perdiz de granja? ¿Caza rápida y barata, o por el contrario, caza de calidad?
Al término de la jornada los cazadores más jóvenes de APEGA entregaron tres placas a los tres invitados a la mesa de debate, mientras que la Unión Nacional de Asociaciones de Caza (UNAC), que estuvo representada en el acto por su Secretario D. Antonio Mota y por el Presidente de la Asociación de Entidades de Caza de la Comunidad Valenciana (ADECACOVA), D. VÃctor Mascarell, entregó al Presidente de APEGA, D. Emilio Martà una placa en reconocimiento por parte de los cazadores de la UNAC a la labor que APEGA ha venido desarrollando en defensa del Patrimonio Natural Cinegético y en concreto en la defensa a ultranza de la perdiz roja silvestre, y que en la actualidad está viendo como su riqueza genética está seriamente amenazada debido a la suelta de hÃbridos de otras especies de perdiz en las repoblaciones que frecuentemente hacen los cotos de caza. La labor de APEGA debe ser un ejemplo a seguir por parte de las sociedades de caza de todo el territorio español, ya que de no adoptar medidas de inmediato sobre este grave asunto podemos estar asistiendo a los últimos dÃas de nuestra especie emblemática del Patrimonio Cinegético español, la perdiz roja silvestre.