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11/11/2005
Territorio inicia batidas para controlar la proliferación de jabalíes en el Desert

· El jabalí daña cultivos y plantaciones además de amenazar la biodiversidad del parque
· La legislación establece medidas de control en una zona declarada como refugio de caza

La inexistencia de depredadores naturales y el abandono de poblamientos humanos en los montes motivan el aumento de este animal

Castellón (11-11-05).- La Conselleria de Territorio y Vivienda realizará, mañana sábado 12 de noviembre, una jornada de control de jabalíes en el Desert de Les Palmes en unas zonas de este paraje natural, previamente consensuados con la sociedad de cazadores, y en función de los daños existentes.

En el control de la batida van a participar 3 agentes medioambientales, 6 personas de las unidades de vigilancia que junto con personal del Seprona cubrirán todos los puntos posibles de entrada a la zona que van a batir, teniendo en cuenta que es una zona de uso público en la que existen sendas, pistas forestales y otros puntos posibles de acceso.

Los lugares inicialmente elegidos pertenecen al término municipal de Cabanes y corresponden a los lugares denominados como Naiximent del Aigua, moli de Monferre, la Señora o la Taruga.Estos coinciden con el entorno de la ermita de les Santes desde la entrada por la carretera que une Cabanes con Oropesa y el lado derecho del camino denominado Miravet, que une la misma carretera con la del Desert de Benicàssim.

Desde 1997 se estableció la figura de “Refugio de fauna en los terrenos cinegéticos de aprovechamiento común del Desert”, con lo cual la población existente en aquel momento ha ido creciendo por causas naturales.

El conseller de Territorio y Vivienda ha destacado que “es necesario el control cinegético del jabalí, ya que el exceso de estos animales provoca daños en los cultivos y plantaciones, además de amenazar a otras especies de fauna, por lo que se ve disminuida la biodiversidad”.

“La Conselleria de Territorio y Vivienda ha estudiado por segundo año consecutivo la forma de contribuir a paliar la problemática suscitada planteando medidas de control posibles” ha añadido el conseller.

En la propia legislación aplicable al espacio natural, se pone de manifiesto en lo referente a la ordenación cinegética que “con carácter excepcional y cuando razones de orden biológico así lo aconsejen se podrán establecer medidas de control de especies cuyo excesivo número pueda perjudicar a la propia vegetación o a los cultivos”.

La Conselleria de Territorio y Vivienda ha mantenido reuniones y conversaciones con propietarios de fincas incluidas en el ámbito del paraje como de las sociedades de cazadores de los municipios pertenecientes al mismo para programar algunas actuaciones que contribuyan a paliar los efectos producidos por estos animales.

Aumento de la población

El incremento de la población de jabalí parece relacionarse con el sustancial abandono del campo por parte de la población rural y la reducción de tierras de labor que ello conlleva, transformadas paulatinamente en áreas de matorral utilizables por la especie. A dicha proliferación contribuye también la extraordinaria tasa reproductora del animal y la inexistencia de depredadores naturales.

El jabalí se adapta a todo tipo de hábitats siempre que disponga de una mínima cobertura y alimento, aunque prefiere los lugares con una vegetación alta donde camuflarse.

En el caso del Desert encuentra uno de sus hábitats preferidos como son los encinares y los macizos forestales con un nivel rico en maleza y zarzas donde puede revolcarse.

Asimismo los alrededores del paraje tienen abundantes zonas de cultivos, naranjos, frutales y otros con lo cual tienen el alimento asegurado.

La creación del Refugio puede haber favorecido también al aumento de la población de jabalí, ya que individuos nacidos en otros lugares han encontrado en este espacio natural el lugar idóneo para refugiarse sin que sean molestados.

Por otra parte este último año de sequía ha motivado la mayor movilidad de los animales en busca de agua ya que hay que señalar que el agua es necesaria para ellos tanto para la bebida como por la gran afición que tiene a revolcarse por el barro y agua con lo que elimina parásitos de su densa pelambrera.